domingo, 29 de agosto de 2010

Cristal convexocabo (4) - Vete a Media Markt si te sientes solo...

Vete a Media Markt si te sientes solo…

El otro día me encontré sin ratón para el ordenador en Jerez, y con esa magnífica excusa me acerqué a Media Markt a comprarme uno…

Aquellos que me conozcan sabrán que es una excusa tonta… para mí entrar en Media Markt es como entrar en el paraíso, todo tecno, y pasillos y pasillos de microelectróni ...ca ..., sonido, imagen, fotografía… etc, etc.

Efectivamente, allí me siento como MacGyver en una ferretería, o Rafa Nadal en el Decathlon, o la Campanario en el Corte Ingles, o la Belén Esteban en el mercadillo…

Pero el otro día fue diferente… algo parecía distinto, algo me decía que decía que no estaba sólo…

Nada más entrar, pasé por la sección de cámaras digitales, y allí me percate que un par de rubias empezaban a mirarme de forma insistente… ¡qué raro!... disimuladamente miré para atrás para ver si miraban a otro, pero no... Es cierto que llevo ya algún tiempo a régimen, y los kilos han ido cayendo, pero la cara la tengo igual… no sé, no sé, ¡que mosqueo!, y encima noté como se fijaban sobre todo en mis pectorales… ¡qué emoción!

Pero bueno, como soy muy tímido, esquivé el tema y me fui directamente a la sección de informática. Allí revisé los IPads, los Mac, y me quise dirigir directamente al apartado de ratones…, cuando, de repente, un chico joven que estaba al fondo del pasillo se estaba fijando en mi… no sé, no sé, será gay, (imaginé), pero el tío insistía, y yo me iba poniendo nervioso… Además, según me iba acercando, se atrevió a venir hacia mí, pero se vé que al final le dio vergüenza y se giró, haciéndose el tonto disimulando con los altavoces…

La cosa fue a peor… observé que todo el mundo, hombres, mujeres, jóvenes, ancianos, me miraba a los ojos con una mirada extraña, como si fuera un camarero, y me quisieran pedir una cerveza y una tapa de ensaladilla…, mis vanidad se convirtió en preocupación, y posteriormente en miedo…

Por último, vi a una señora muy emperifollada que después de repetir el rito de la mirada, se atrevió a acercarse y dirigirse a mí con una pregunta extraña: ¿es usted de aquí?...

Después de valorar la pregunta, y pensar si se refería a si era de Jerez, andaluz, español, o a que puñetas se refería, acerté a imaginar que quería preguntarme si trabajaba allí…, algo que negué con la cabeza, y a lo que ella respondió: “como lleva usted un polo rojo”, “usted perdone”…

Desde aquel día, todas las noches me despierto a las 3 de la mañana, perseguido por un grupo de zombis con videoconsolas, televisores, batidoras, etc, en las manos gritándome: “¡Yo no soy tonto!, ¡yo no soy tonto!”.


Creo que voy a crear un grupo en Facebook, y lo llamaré “Yo también fui a Media Markt con un polo rojo”…

Seguro que a alguien le gusta...
 
 
Fulgencio Meseguer Galán